¿Qué Es el Pasaporte Fitosanitario y Cómo Te Afecta Como Consumidor? Actualizado a 2021

Si alguna vez te has encontrado en la tesitura de querer devolver una planta comprada en un centro de jardinería, es muy probable que el vendedor te haya hablado del pasaporte fitosanitario. Este documento constituye una pequeña traba administrativa que, por un lado afecta a la tienda, pero por otro lado debería dar seguridad al consumidor. Muchos cliente ni siquiera saben qué es el pasaporte fitosanitario y en qué les afecta o en qué les beneficia.

👉 Antes de continuar leyendo me gustaría aclarar que no soy abogado ni gestor que tramite la gestión de pasaportes fitosanitarios. Si estás buscando cómo conseguir un pasaporte fitosanitario, este no es tu artículo de referencia. Pero puedes hacer click en este enlace y leer el documento del Ministerio de Agricultura de España. Si eres una empresa, deberás hablar con tu gestor para registrarte como ROPVEG antes de nada.

¿Qué Es el ROPVEG?

La ley define el ROPVEG como el Registro de Operadores Profesionales Vegetales. Es decir, una lista de suscripción obligatoria para las empresas relacionadas con productos vegetales. El registro se realiza por Comunidad Autónoma según el domicilio fiscal de la empresa en cuestión. Los operadores serán quienes recibirán lo que es el pasaporte fitosanitario europeo en cuestión, a pesar de registrarse a nivel local.

¿Quién Debe Registrase como ROPVEG?

La ley es bastante clara en lo referente a quienes son Operadores Profesionales.

• Quienes se dediquen a la plantación, cría y reproducción de especies vegetales.
• Quienes trabajen en la mejora de las especies vegetales
• Las empresas que produzcan, multipliquen o mantengan especies vegetales
• Empresas que se dediquen al transporte de especies vegetales
• Aquellos que comercialicen, recoleccionen o transformen especies vegetales

Como es lógico, no todas las empresas que dispongan de un pasaporte fitosanitario se dedicarán a cultivar plantas, puede que simplemente las vendan en tiendas o establecimientos. El registro del operador en España consta de la siguiente nomenclatura: ES + Código de la Comunidad Autónoma + Código de Provincia + Número de operador. En total, cada número de registro deberá estar compuesto por 8 cifras.

De esta forma se pueden identificar fácilmente todas las empresas relacionadas con la planta. Ahora bien, el código del operador no es un pasaporte fitosanitario, sino un requisito previo para poder añadirlo a los productos vegetales. No se puede comercializar, ni cultivar vegetales legalmente en la Comunidad Económica Europea sin un código de operador válido y actualizado.

¿Qué Es el Pasaporte Fitosanitario?

El pasaporte fitosanitario se define como la «marca oficial» o el «sello de calidad» que acompañan a los productos vegetales por el territorio de la Unión Europea. No se puede vender, comerciar, transportar o modificar ningún producto vegetal sin documentarlo legalmente. La responsabilidad de los operadores que expiden el pasaporte fitosanitario de la planta o del producto vegetal incluye la verificación de que no solo está exenta de plagas, sino que además no se comercia con especies que puedan suponer un riesgo a las especies protegidas dentro de la Unión.

¿Cuántos Modelos de Pasaporte Fitosanitario Existen?

La siguiente imagen es un ejemplo de pasaporte fitosanitario. .

Existen 4 modelos de pasaporte fitosanitario o PF. Los modelos A y B son modelos se utilizarán para la gestión de plantas en zonas protegidas de la Unión Europea. Los modelos A y B obligan a incluir un código de trazabilidad del vegetal para saber siempre su origen y composición. Los modelos C y D solo llevarán una etiqueta de certificación general de acuerdo al CAC (Conformitas Agraria Communitatis)

¿Donde Debe Colocarse el Pasaporte Fitosanitario?

Lo que es el pasaporte fitosanitario como tal deberá situarse en un lugar visible para todos los especímenes que se manipulen o transporten o vendan. Como la ley indica: «en cada unidad comercial sin excepción». Cada planta que compremos en un vivero o tienda de jardinería deberá llevar una etiqueta con el pasaporte fitosanitario visible.

No es necesario adjuntar el Pasaporte fitosanitario cuando:

• Se traslada dentro de las instalaciones de la misma empresa
• Cuando el material va a ser suministrado al cliente final. Por ejemplo cuando un jardinero te lleva unas plantas al jardín de tu casa.
• Cuando el cliente final transporta una planta comprada en un centro de jardinería o un vivero
• Si se transportan pequeñas cantidades (por ejemplo, para corregir la falta de algunas unidades en un pedido entre empresas)

¿Qué Obligaciones Conlleva el Pasaporte Fitosanitario?

La emisión de un PF contempla una serie de obligaciones. Estas obligaciones son las que determinan realmente que es un pasaporte fitosanitario: asegurar y demostrar que los envíos están libres de plagas. En segundo lugar, un control exhaustivo de los puntos críticos de la distribución para evitar la propagación de enfermedades y plagas por la Unión Europea siendo el cliente final el último destinatario.

Así que el PF no deja de ser un protocolo legal que nos garantiza que los viveros y centros de jardinería no nos van a vender una planta con una plaga que, una vez colocada dentro de casa, nos invadirá el jardín. También contribuye a que los viveros no puedan expender plantas enfermas que acaben contagiando al resto de plantas en las tiendas, arruinando así negocios enteros. Como también evita las empresas puedas mover mercancía vegetal sin las inspecciones adecuadas que garanticen la calidad de las plantas y su salud.

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La Guía de Sustratos para plantas te ayudará a entender los distintos tipos y usos de los sustratos comerciales que se venden para jardinería y horticultura.

¿En Qué Afecta el Pasaporte Fitosanitario al Consumidor?

No es extraño que los clientes se pregunten qué es el pasaporte fitosanitario cuando desean hacer una reclamación en la tienda. La existencia de este pasaporte garantiza que la planta está en perfecta condiciones cuando llega nuestra casa, por lo menos a nivel de plagas. Cuando nos llevamos una planta a nuestros balcones o terrazas, el pasaporte fitosanitario rompe la cadena de custodia. Es decir, si devolvemos una planta la tienda ya no la pueden volver a vender. El PF nos asegura la tranquilidad en todas nuestras compras.

Cuando compramos una planta necesitamos estar seguros de que nadie la ha tenido en su jardín previamente. Una vez fuera del establecimiento, no se garantiza que esté libre de plagas. Cada tienda puede optar por la política de devoluciones que desee, pero no puede aceptar devoluciones de plantas y venderlas de nuevo. Como tampoco puede aceptar plantas cultivadas por particulares o esquejes de clientes y revenderlos.

El pasaporte sanitario es una garantía para el consumidor y no debe tomarse a la ligera. La Unión Europea no lo hace.

Bibliografía y Fuentes de Información

El Pasaporte Fitosanitario según el Departamento de Agricultura

El Listado de Productos Vegetales Completos que Requieren Pasaporte Fitosanitario