Los Cuidados de la Menta y de la Hierbabuena

Se trata de la planta aromática por excelencia, y los cuidados de la menta o de la hierbabuena son bastante sencillos. Esto la convierte en la aromática más habitual de los viveros y de muchas casas con jardín o terraza. Su olor fuerte y anisado es inconfundible y sus aplicaciones en gastronomía variadas: desde infusiones a postres. ¿Cuántas veces no nos han servido un postre con una ramita de menta encima?

¿Sabías que la Menta ayuda a repeler los mosquitos? De hecho se considera una planta anti mosquitos. Se debe al olor de sus hojas que molesta tanto al mosquito europeo, como el mosquito tigre. No debemos confiarnos, pero colocar menta en la cocina puede resultarnos útil para evitar que esos insectos entren en casa y nos piquen.

¿Menta o Hierbabuena?

La primera pregunta de este artículo es saber si la menta y la hierbabuena son lo mismo. A menudo las plantas o las flores adquieren nombres distintos, pese a ser la misma especie. Este no es el caso de la menta y la hierbabuena, ya que son especies diferentes de una misma familia. Ambas desprenden un olor similar y tienen como característica visible principal unas hojas verdes serradas características.

¿Cuáles son las Diferencias entre Menta y Hierbabuena?

La menta es el resultado de un cruce que recibe el nombre de Mentha Piperita. Se caracteriza por un olor fuerte y un color verde mucho más intenso. Puede llegar hasta los 60cm de altura o más. La hierbabuena (Mentha Spicata) tiene hojas más redondeadas y su frescor y olor no es tan fuerte. No suele superar los 30cm de altura.

Cuidados de la Menta

Los cuidados de las mentas no son complicados, pero sí muy específicos. Lo primero que debemos entender es que se trata de unas especies de crecimiento muy rápido y altamente invasivas. Se tratan de arbustos que crecen lateralmente y se adueñan de la zona con muchísima facilidad. De ahí que sea preferible mantener estas plantas en maceta. Si lo hacemos en jardín, deberemos vaciar un área de unos dos metros cuadrado y trasplantar 3 plantas. En poco tiempo, la zona se convertirá en un frondoso matorral.

Como medida de precaución mantendremos la menta alejada de otras plantas para evitar que se propaguen de forma involuntaria.

Mapa Visual de los Cuidados de la Menta y la Hierbabuena

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¿Cuáles son los cuidados de la menta y la hierbabuena?

Las mentas son plantas aromáticas que requieren de mucha luz, incluso sol en temporadas frías. El riego debe ser habitual y constante, pero evitando encharcar el sustrato, que deberá drenar el agua. Es preferible cuidar las mentas y las hierbabuenas en maceta para controlar su crecimiento y podarlas por los lados de forma regular. Se pueden abonar una vez al año con humus de lombriz.

👉 Las 3 Reglas del Cuidado de la Menta

• Mantenerla en maceta preferentemente
• Mantener el sustrato siempre húmedo, pero no encharcado
• Poda constantes de las hojas laterales

Sustrato

Para cuidar bien de una menta resulta necesario disponer de un sustrato rico en fertilizante orgánico, como el humus. También podemos utilizar sustrato de huerto ecológico. El sustrato debe tener un buen drenaje.

Si colocamos las mentas en maceta, no olvidemos que tendremos que trasplantarlas a una maceta ancha y de al menos 20cm de profundidad.

Riego y Agua

Los cuidados de la menta y la hierbabuena incluyen el riego abundante evitando siempre encharcar la tierra y las raíces. A la menta le gusta el agua y podemos regarla cuando el sustrato lo requiera. Se puede regar, por ejemplo, cada dos días.

Sol y Luz

Para el crecimiento óptimo de estas plantas, es necesario una temperatura cómoda de entre 15º y 20º centígrados. Durante la época de más calor, podemos ofrecerle sombra y tanto la hierbabuena como la menta lo agradecerán. En invierno podemos dejarlas al sol sin temor de que les pase nada.

Abonado

Se debe abonar una vez al año con fertilizante orgánico, aunque si quieres que la planta sea menos invasiva y crezca algo más lenta, puedes espaciar el abonado si el resto de condiciones son las adecuadas.

Poda y Enfermedades

La poda es uno de los puntos fundamentales para la salud de las mentas. Los cuidados de la menta y la hierbabuena incluyen la poda constante o la planta se debilitará, empezado siempre por los lados cuando veamos que se va expandiendo. De esta forma, también controlaremos su tamaño.

Es habitual realizar una poda completa al menos una vez al año. Para ello, cortaremos la planta entera y dejaremos unos 5 u 8 centímetros de tallos desde la punta al suelo.

Las Mentas y Hierbabuenas en Vivero

Estas plantas aromáticas suelen estar disponibles todo el año en cualquier vivero. Se venden, por lo general, en maceta pequeña de 11cm cuando la planta todavía es joven. De esta forma no solo es más barata y les ocupa menos lugar, sino que permite al cliente decidir qué desea hacer, trasplantar en maceta o en suelo. Si las dejamos en maceta pequeña, no crecerá tanto, pero podremos podarla igualmente por los lados y usarla como ambientador natural y ecológico para nuestra cocina o patio.

Si eres de esas personas que tienen paciencia y les gusta probar cosas, no es necesario que compres muchas plantas de menta. Compra una y hazla crecer en una maceta ancha. Con las poda podrás retirar esquejes que podrás plantar en otras macetas para conseguir más menta totalmente gratis.

Planta los esquejes en sustrato húmedo en macetas pequeñas de 10 cm y añade un poco de enraizante. En breve tendrás nuevas mentas y más fragancia allí donde las quieras poner.

Usos Culinarios de la Menta y la Hierbabuena

Tanto la menta como la hierbabuena se utilizan o forman parte de los ingredientes para:

• infusiones (poleo menta)
• Chicles y caramelos (aromatizantes)
• Ensaladas
• Sopas
• Postres

La menta y la hierbabuena son comestibles así que podrás utilizar esta planta en recetas que puedes buscar por libros de cocina o por Internet.